“ESPEJISMO DEL FIN DE LA HISTORIA ”
Cuando recordamos nuestro pasado, nos vemos distintos. Sentimos cuánto han cambiando nuestras personalidades y gustos a través de los años. Pero cuando nos fijamos en el futuro, aspiramos a ser los mismos que somos ahora. Se trata, según los sicólogos que investigan el tema, de un fenónemo de autopercepción llamado “el espejismo del fin de la historia“, según el cual las personas no creen que cambiarán en el futuro, pues ya son como quieren ser.
La investigación se llevó a cabo en más de 19 mil personas, con edades entre 18 y 68 años, y comprobó que “el espejismo del fin de la historia” está presente en todas las edades, no importa si somos adolescentes o jubilados.
“La gente de mediana edad como yo -dice Daniel T. Gilbert, un sicólogo de Harvard que participó en la investigación- vemos el pasado con una mezcla de simpatía y desagrado. Lo que no pensamos es que cuando estemos en el futuro, recordaremos el presente con la misma sensación. En cada etapa de nuestra vida pensamos que tenemos la última palabra, y siempre estamos equivocados en eso“.
El doctor Gilbert y sus colaboradores: Jordi Quoidbach de Harvard y Timothy D. Wilson de la U. de Virginia, tienen algunas hipótesis que tratan de explicar por qué ocurre “el espejismo del fin de la historia“. La primera tiene que ver con una bien documentada tendencia humana: sobreestimarnos.
“Creer que estamos en el pico de nuestra evolución personal nos hace sentir bien” dice Quoidbach. Y si estamos en nuestro máximo… ¿Para qué imaginar que cambiaremos? O quizás la respuesta sea más simple: imaginar el futuro cuesta más trabajo que recordar el pasado, entonces lo más simple es pensar que el futuro no sufriremos cambios
El creer que seguiremos teniendo la misma personalidad en el futuro tiene desventajas, como hacernos tomar decisiones (tatuajes, matrimonios, etc) que luego quizás lamentemos.
Para determinar cómo las personas evaluaban sus finanzas futuras sin despertar angustias, usaron la figura del costo de las entradas para ver a sus grupos de música favoritos. Todos los que hoy pagan hasta 80 dólares por entradas, se mostraron dispuestos a pagar hasta 129 dólares para asistir a un futuro concierto de su banda favorita, lo que indica que pensaban que seguirían teniendo el mismo poder adquisitivo y el mismo gusto musical que en el presente, y que sus bandas continuarían ofreciendo el mismo atractivo que tienen ahora.
Una investigación sicológica distinta, hecha por el profesor Dan P. McAdams, avala las conclusiones de este estudio. McAdams le pidió a sus sujetos de estudio que escribieran sus historias pasadas y futuras. Las historias pasadas resultaron más o menos precisas, dinámicas y llenas de detalles. Las historias futuras, vagas y sin mayores cambios.
McAdams recuerda una conversación que tuvo con su hija de cuatro años, en la década de los ochenta, cuando la niña era una fanática de “Las Tortugas Ninja“. El padre le sugirió que eso cambiaría con los años, pero la niña se resistió a aceptarlo.
Años después, ya de adulta, la hija de McAdams recordó esa conversación y reconoció que en ese momento intuyó que su padre tenía razón, pero que simplemente no podía imaginar su vida sin las Tortugas Ninja. “Quizás eso es lo que ocurre con los adultos también, intuimos que cambiaremos, pero somos incapaces de imaginarlo” concluye McAdams.
Información de TheNewYorkTimes. Versión, edición y traducción de Sophimanía
http://sophimania.pe/2013/01/05/estudio-espejismo-del-fin-de-la-historia-nos-dificulta-proyectar-el-futuro-con-acierto/
La investigación se llevó a cabo en más de 19 mil personas, con edades entre 18 y 68 años, y comprobó que “el espejismo del fin de la historia” está presente en todas las edades, no importa si somos adolescentes o jubilados.
“La gente de mediana edad como yo -dice Daniel T. Gilbert, un sicólogo de Harvard que participó en la investigación- vemos el pasado con una mezcla de simpatía y desagrado. Lo que no pensamos es que cuando estemos en el futuro, recordaremos el presente con la misma sensación. En cada etapa de nuestra vida pensamos que tenemos la última palabra, y siempre estamos equivocados en eso“.
El doctor Gilbert y sus colaboradores: Jordi Quoidbach de Harvard y Timothy D. Wilson de la U. de Virginia, tienen algunas hipótesis que tratan de explicar por qué ocurre “el espejismo del fin de la historia“. La primera tiene que ver con una bien documentada tendencia humana: sobreestimarnos.
“Creer que estamos en el pico de nuestra evolución personal nos hace sentir bien” dice Quoidbach. Y si estamos en nuestro máximo… ¿Para qué imaginar que cambiaremos? O quizás la respuesta sea más simple: imaginar el futuro cuesta más trabajo que recordar el pasado, entonces lo más simple es pensar que el futuro no sufriremos cambios
El creer que seguiremos teniendo la misma personalidad en el futuro tiene desventajas, como hacernos tomar decisiones (tatuajes, matrimonios, etc) que luego quizás lamentemos.
Para determinar cómo las personas evaluaban sus finanzas futuras sin despertar angustias, usaron la figura del costo de las entradas para ver a sus grupos de música favoritos. Todos los que hoy pagan hasta 80 dólares por entradas, se mostraron dispuestos a pagar hasta 129 dólares para asistir a un futuro concierto de su banda favorita, lo que indica que pensaban que seguirían teniendo el mismo poder adquisitivo y el mismo gusto musical que en el presente, y que sus bandas continuarían ofreciendo el mismo atractivo que tienen ahora.
Una investigación sicológica distinta, hecha por el profesor Dan P. McAdams, avala las conclusiones de este estudio. McAdams le pidió a sus sujetos de estudio que escribieran sus historias pasadas y futuras. Las historias pasadas resultaron más o menos precisas, dinámicas y llenas de detalles. Las historias futuras, vagas y sin mayores cambios.
McAdams recuerda una conversación que tuvo con su hija de cuatro años, en la década de los ochenta, cuando la niña era una fanática de “Las Tortugas Ninja“. El padre le sugirió que eso cambiaría con los años, pero la niña se resistió a aceptarlo.
Años después, ya de adulta, la hija de McAdams recordó esa conversación y reconoció que en ese momento intuyó que su padre tenía razón, pero que simplemente no podía imaginar su vida sin las Tortugas Ninja. “Quizás eso es lo que ocurre con los adultos también, intuimos que cambiaremos, pero somos incapaces de imaginarlo” concluye McAdams.
Información de TheNewYorkTimes. Versión, edición y traducción de Sophimanía
http://sophimania.pe/2013/01/05/estudio-espejismo-del-fin-de-la-historia-nos-dificulta-proyectar-el-futuro-con-acierto/
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